Entrevista a Sera J

Hablamos con Dimitris, también conocido como Sera J, joven griego de 28 años que actualmente reside en Tesalónica (Grecia). Ha tenido la oportunidad de compartir cabina con artistas como Stef Mendesidis, Ben Klock y Dax J. E, incluso, ha publicado en sellos como Planet Rhythm y Mutual Rytm.

Actuará por primera vez en España junto a Beat Club y el colectivo OX Techne el próximo sábado 23 de septiembre en Madrid.

¿En qué momento de tu vida se cruzó la música electrónica en tu vida?

A una edad muy temprana, escuchaba diferentes estilos de música, especialmente House, y alrededor de 2006 empecé a explorar la música electrónica en diferentes formas, como House, Ambient, Electrónica, Tech House y después Techno.

¿Desde tu primer trabajo hasta el último que has lanzado, ¿cómo describirías su evolución? A nivel musical ¿qué factores han influido y cuáles has tenido que eliminar para encontrarte en el punto en el que estás ahora?

Es una gran evolución y mejora. Cada día que pasa es un nuevo día y una nueva oportunidad para descubrir algo nuevo. Me supero cada día en términos de producción, ¡pero no sólo eso! Mejoro en todo. Exploro nuevas influencias, nuevos sonidos y nuevas ideas. Una gran influencia para mí es la gente que me rodea. La gente que me quiere y me apoya me da fuerzas para seguir adelante. Lo único que tienes que eliminar para encontrarte a ti mismo es el miedo a no estar haciendo algo bueno. ¡Cada uno tiene su propio camino!

¿Cuáles han sido tus referentes en cuanto a sellos, dj´s y productores se refieren?

Mis influencias musicales básicas provienen de los sonidos de Detroit y de todos los artistas que han dejado un gran legado en la música electrónica, como Jeff Mills, Mad Mike – Undeground Resistance, Derrick May, por nombrar algunos. Me encantan Gaetano Parisio, Dj Bone, Ben Sims, Robert Hood & Floorplan y también The Advent, Stef Mendesidis y otros muchos.

«Creo que un artista debe estar abierto a escuchar diferentes estilos de música, tener la mente abierta. ¡Todo el mundo te influye de manera diferente y sin límites!»

¿Cómo describirías tu sonido?

Líneas de bajo potentes con matices Detroit y, a veces, con elementos tribales y estilo Hardgroove. Definitivamente con espíritu de los 90 y 00.

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¿Cuál es tu último trabajo publicado y bajo qué sello?

Mi último trabajo publicado es mi tema «Funk» publicado en Burned At Both Ends, un sello dirigido por Habgud. En realidad, es uno de mis favoritos y un tema muy antiguo mío y estoy muy contento de que por fin salga a la luz.

Bajo tu criterio, de entre todos tus trabajos, ¿cuál o cuáles son los más destacables? ¿Podrías reseñar algunos temas y bajo qué sellos han sido publicados?

Es difícil destacar alguno como mejor… ya sabes… ¡porque todos son mis bebés! Definitivamente me alegré mucho cuando publiqué mi primer disco en la serie Unknown de Planet Rhythm y me emocioné mucho cuando formé parte de Federation of Rytm II en Mutual Rytm. Pero en general estoy super orgulloso de todos mis temas y de todos los sellos con los que he colaborado.

Es la primera vez que vas a actuar en España en colaboración con BEAT Club y OX Techne, colectivo especializado en el sonido a vinilo ¿cómo te sientes al respecto? ¿qué estás preparando para este momento?

Estoy súper contento de poder actuar en España. ¡Me encanta este país en general! Estoy deseando compartir mi pasión con el público español. ¡Estoy preparando un set super enérgico con mucha de mi nueva música!

¿Piensas que la música puede incidir en los valores de una persona, forma de vivir y de ver la vida?

«La música es un aspecto esencial de todas las civilizaciones humanas y tiene el poder de afectar emocional, moral y culturalmente a la sociedad. La música, como derecho cultural, puede ayudar a promover y proteger otros derechos humanos. Puede ayudar en el proceso de curación, el desmantelamiento de muros y fronteras, la reconciliación y la educación»

«Todos sabemos que la exposición a la belleza, el ritmo y la armonía de la música influye significativamente en cómo nos sentimos. También sabemos que la música nos impacta emocionalmente, llegando a recuerdos olvidados y conectándonos con nosotros mismos»

En nuestra experiencia cotidiana con la música, la utilizamos para relajarnos, expresarnos, aceptar nuestras emociones y, en general, mejorar nuestro bienestar.

«Ha evolucionado hasta convertirse en una herramienta de curación y autoexpresión, que a menudo dicta la forma en que, como individuos, tomamos medidas para influir en la sociedad»

Por eso creo firmemente que la música, en cualquiera de sus formas, tiene una gran importancia en nuestra vida.

Hasta ahora, ¿cuál crees que ha sido tu actuación más remarcable? ¿Con quién compartías cabina?

Fui residente en muchos proyectos que se llevaban a cabo en mi ciudad durante más de 12 años, así que tuve la oportunidad de compartir cabina con algunos de los artistas internacionales con más talento como Stef Mendesidis, Ben Klock, Jonas Kopp, Dax J, Paal (Voitax), Keith Carnal, Setaoc Mass, Paula Temple, Axel Karakasis, JudaƩ, SNTS, por nombrar algunos.

Creo que todas mis actuaciones son notables para mí porque cada vez he tenido algo que aprender y me lo he pasado muy bien en todas ellas.

En Basspirit Magazine nos encanta preguntar a nuestros entrevistados sobre sus gustos musicales, ¿qué música escuchas cuando no estás embarcado en la electrónica?

¡Escucho varios tipos de música! Me encanta el hip hop, la música disco, las canciones de los 80 y 90, ¡y también la música ambient y clásica!

¿En qué lugar del mundo crees que está comenzando a pegar fuerte la escena? ¿Hacia dónde crees que se inclina la tendencia?

Creo que ahora la escena está un poco separada. Por un lado, estoy muy contento de que el Hardgroove esté volviendo con tantos buenos artistas que producen y pinchan sonidos del pasado. También el techno real y los sonidos clásicos de todos los tiempos están aquí, profundamente arraigados en muchos artistas que intentan mantener vivo este legado y mejorar la escena. Sellos como Hardgroove, Mutual Rytm, Symbolism, Blueprint, Klockworks, Token, Projekts, Clergy, etc. intentan mantener un sonido clásico de antaño en el techno que a mí personalmente me encanta.

Por otro lado, el trance, el psytrance, los BPM más altos y baggy neon style de los 90 parecen abrirse paso cada vez más. Incluso el progresivo ha dejado de ser una palabra malsonante con DJs que pinchan temas de estilo progressive house.

Creo que durante el Covid todo el mundo estaba sometido a mucha presión y eso se refleja hoy en día en la música de los clubes. Además, después del horror de los últimos años, todo el mundo quiere salir de fiesta y quizás no se deje llevar tanto por las vibraciones nihilistas del EBM punk. Así que, después del covid, veo que el estilo Hard y los BPM más altos están recibiendo cada vez más atención hoy en día.

Hubo muchos cambios tras la pandemia. Yo diría que estos cambios han sido buenos en algunos aspectos y malos en otros.

Durante ese periodo se desarrollaron nuevas escenas y también da la sensación de que muchos adolescentes, que ahora tienen edad para salir, no vivieron su adolescencia de la manera que debió ser. La situación es muy parecida a la de los 90: subgéneros muy específicos como el jungle, techno, el tech, trance o el hard acid han vuelto. Aunque se trata de sonidos antiguos, algunos productores más recientes les han dado una vuelta de tuerca con una producción mejorada.

También las redes sociales, incluidas plataformas como YouTube, Tik Tok o Instagram, han facilitado el acceso inmediato de los aficionados a la música, los artistas y los sellos discográficos. Creo que esta es la principal razón por la que nos encontramos en un periodo en el que la música electrónica, y en particular el techno, ha pasado a formar parte de la cultura dominante.

Así que las nuevas generaciones que llegaron a los clubes después de la pandemia habían oído hablar del techno a través de las redes sociales, pero nunca habían estado en un club y escuchaban ese género en casa, procedentes quizá del hard dance, o del hardcore o del ravey happy hardcore. Entonces, irrumpen en un club y quieren escuchar cosas a 160 kilómetros por hora porque no han oído nada diferente. Por eso creo que el estilo Hard ha ganado más atención en los últimos años.

Por supuesto, todo se acepta y hoy en día la escena es más abierta de mente que nunca. La música no tiene límites. Y así es como debería ser. Sin límites, todos juntos, sin racismo y con más respeto hacia los demás, musical y personalmente.